¿Sabes por qué no me aburriría de ti?
¿Sabes por qué no me pesa nada de ti?
Me contaron desde pequeña que uno se enamora de las personas, de las cosas, de los lugares, pero eso en realidad no es muy exacto, la realidad es que uno se enamora del misterio...
El misterio es eso de lo que están hechas todas las cosas y seres, pero ya no lo sentimos porque nos hicieron creer que eso, de lo que están hechas las cosas y seres, es algo insignificante, es algo comprensible y no necesitado de ser examinado, que es algo trivial y nada interesante...
Pero en el fondo nos enamoramos del misterio, creemos que nos enamoramos de la belleza ajena, pero mas bien nos torna sensibles y conscientes del misterio que está detrás; del misterio de que pueda ser posible ¿Por qué la naturaleza es tan bella??
Por eso cuando usamos demasiado a una persona, o cosa, o lugar, vamos perdiendo el enamoramiento hasta que nos sentimos aburridos y desilusionados... No es que la persona, cosa o lugar tengan algún defecto, es sólo que perdimos la sensación del misterio, la sensación de que lo que esta frente a nuestros ojos no puede ser explicado.
Perdemos el enamoramiento cuando insistimos en explicar eso que amamos, cuando insistimos en hacerlo encajar en el molde social, cuando insistimos en creer que eso que amamos, está para satisfacer nuestras necesidades físicas y emocionales...
Podemos evitar que el enamoramiento termine, sólo necesitamos ser humildes y aceptar que nuestra mente es demasiado pequeña, que eso que está frente a nuestros ojos no tiene realmente una explicación, ni nunca la tendrá, no hay forma de saber realmente qué es esto que esta aquí justo ahora, no hay forma de saber de qué está hecho, ni de dónde vino, ni adónde va, en verdad no hay forma de saberlo, y eso es lo que nos enamora...